Audi Q6 e-tron 2024: el SUV eléctrico que lo cambia todo
El Q6 e-tron abre un nuevo capítulo entre los eléctricos de Audi. Respecto al primer e-tron supone un enorme salto evolutivo
No es el primero, ni el segundo vehículo cien por cien eléctrico de Audi, pero el Q6 e-tron que hemos tenido la oportunidad de ver y tocar en Munich, muy cerca de Ingolstadt (donde se fabrica para todo el mundo), es uno de esos coches que marcan un nuevo camino. En este caso es el primero de toda una nueva generación de coches eléctricos de los segmentos superiores para Audi.
El Q6 e-tron (y pronto le seguirá el nuevo A6 eléctrico) estrena para Audi una nueva base mecánica (la plataforma PPE -de Platform Premium Electric-) y electrónica (E3 1.2) que configurarán el corazón y el alma de los próximos modelos de baterías de la marca de los aros. Y no sólo de ella, ya que es un desarrollo conjunto con Porsche. De hecho, ya os hemos hablado de ella porque el primer coche que conocimos con esta base fue el Porsche Macan.
Cuando hablamos de plataforma nos referimos a un conjunto de elementos que básicamente incluyen batería, motores eléctricos (con su correspondiente electrónica de control) y chasis. Todo eso será común en los próximos Porsche y Audi de los segmentos premium (del tamaño medio hacia arriba) y todos disfrutarán de unas prestaciones que están un escalón por encima de lo que conocemos hasta ahora... en todos los ámbitos.
Autonomías de hasta 600 kilómetros
Por ejemplo, el parámetro clave y que más preocupa a los conductores de coches eléctricos, la autonomía de las baterías, salta en los Q6 e-tron hasta más allá de los 600 kilómetros. Inicialmente llegarán dos versiones con la pila de mayor capacidad de todas las que se ofrecerán (100 kWh brutos, 94,9 netos) y en la de arranque (el Q6 e-tron) el rango es de 625 kilómetros por recarga. En el segundo, el SQ6 (con 490 en lugar de 387 CV) se reduce hasta 598. Pero la nueva referencia mental -hablando en números redondos- es esa: 600 kilómetros (habrá que comprobarlo cuando lo probemos, lógicamente).
Esa ambición ya nos muestra que esta nueva generación de eléctricos premium del grupo Volkswagen va a dar un salto importante en rendimiento. Y también a la hora de la recarga, porque las baterías (suministradas por el principal fabricante mundial, CATL) admiten potencias de recarga de hasta 270 kW y trabaja con 800 V. Eso es un factor diferencial para usarlo en viajes largos y supondría -si la infraestructura lo permite- hacer la 'carga tipo' del 20 al 80% (la que dan como referencia los fabricantes porque es la más óptima en términos de velocidad) en 21 minutos. Como referencia, la carga completa en esas mismas circunstancias se completaría en una hora.
Para la carga en casa, el Q6 e-tron cuenta con un cargador integrado de 11 kW, aunque más adelante se ofrecerá otro de 22. Sin embargo, por el momento, no permite hacer un uso bidireccional de la carga de la batería, ni hacia la red eléctrica ni hacia dispositivos externos, aunque desde Audi se apunta a que esta funcionalidad que se podría activar más adelante.
Motores en cada eje
El Q6 e-tron tendrá posibilidad de montar dos motores, diferentes en cada uno de los ejes. El delantero será asíncrono (de 190 CV) y su función principal será la de apoyar al principal, que se encuentra en el eje trasero. En este caso se trata de un motor de imanes permanentes, con hasta 380 CV de potencia. Estos nuevos motores consumen un 50% menos de energía y son parte de los culpables de que esta generación de vehículos eléctricos reduzca su consumo total en un 30%.
El Q6 e-tron contará con varios niveles para recuperar energía en las frenadas. El más 'drástico' será el modo B, que equivale al conocido como One Pedal Mode, que básicamente nos permite no usar el freno: desde el momento en el que levantamos el pie del gas el coche frena con cierta potencia... hasta llegar a detenerse por completo.
Sin embargo, es un modo algo incómodo (tuvimos ocasión de conducir uno de los prototipos) porque decelera mucho desde el primer momento. Pero con la posición D también podemos regular en tres niveles la retención de los motores: la primera nos deja un tacto similar al de un coche de combustión y con las dos siguientes podemos modular bastante bien la retención.
Carrocerías SUV y Sportback
Inicialmente hemos conocido al Q6 e-tron en su variante SUV, con sus 4,77 metros de longitud y sus 526 litros de maletero (más 64 delante, bajo el capó) como referencias de dimensiones clave. Pero después -ya en 2025- se incorporará -cómo no- una carrocería Sportback con un estilo más coupé.
El Q6 SUV ya tiene detalles más ambiciosos en cuanto a deportividad en su estética, sobre todo en la vista lateral, donde hay volúmenes tanto en los hombros (delante y detrás) como en la parte baja de las puertas, que le dan un aire agresivo. La parrilla frontal es bastante cerrada y eso le resta atractivo, bajo nuestro punto de vista. Detrás es más vistoso, con pilotos OLED que, junto con los faros digitales (primicia en la marca), conforman uno de los elementos clave del nuevo coche.
Faros que cambian de forma
Audi ha hecho de la tecnología de iluminación una de sus señas de identidad... y en este Q6 e-tron va un paso más allá. Porque el SUV medio alemán estrena faros y pilotos con firma luminosa personalizable... y capaces de comunicar mensajes al exterior.
Los faros digitales de luz diurna cuentan cada uno con 60 módulos que se pueden gestionar individualmente para crear diferentes looks. De hecho, los conductores tendrán seis diseños que podrán alternar a su gusto, bien cambiándolos desde la pantalla central o bien desde el teléfono móvil.
Pero, además, los pilotos traseros (más complejos al basarse en tecnología OLED) cuentan con tres pequeños paneles en la parte inferior con 60 módulos cada uno que permiten, además de personalizar el diseño, operar como señalización hacia el exterior. En diferentes circunstancias de emergencia (como en caso de avería), esos paneles muestran un triángulo que puede servir de alerta a otros vehículos.
Un interior de nueva generación
El Audi Q6 e-tron abre sus puertas y el conductor se sumerge en un universo completamente nuevo. Es cierto que los interiores de Audi siempre han sido referencia de modernidad, pero últimamente se habían quedado un poco estancados. Pues eso ahora cambia totalmente porque la digitalización llega... incluso a la zona del pasajero.
El Q6 será el primer Audi con una pantalla para el copiloto, de 10,9 pulgadas, que se ofrecerá como equipamiento opcional. En ella, nuestro acompañante podrá gestionar por nosotros funciones como la navegación, la climatización o el equipo de audio (de modo que podamos estar completamente centrados en la conducción), pero también disfrutar de vídeos incluso en marcha en los países en los que la legislación lo permite. La tecnología de esta pantalla hace que, cuando el coche está en movimiento, su contenido sea invisible para el conductor.
El cockpit digital característico de Audi desde hace ya varios años cambia de paradigma y ahora el protagonismo ya no es para los mapas sino para la monitorización del tráfico a nuestro alrededor (clara influencia de Tesla). El monitor principal, que se integra con el cuadro de relojes en un panel curvado (que, además, tiene unas formas similares a la parrilla singleframe) tiene muchísimas funciones: entre ellas, la que nos permite cambiar la firma luminosa de los sofisticados faros delanteros digitales y los pilotos traseros OLED. También resulta curioso ver cómo el asistente vocal se muestra en la pantalla como un avatar, que tiene una representación gráfica que recuerda al Kitt de Coche Fantástico.
Durante el verano lo veremos rodar por España, aunque los pedidos se abrirán ya este mes de marzo. De momento no se conocen los precios pero deberían rondar los 75.000 - 80.000 euros para la versión inicial... aunque después (a final de año) llegarán otras versiones por debajo, con una batería más pequeña (83 kWh) y propulsión únicamente trasera. Y en una oleada posterior, nosotros apostamos también por un RS Q6 que pueda hacerle sombra al Macan Turbo y sus 639 CV.
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